MACHALILLA
La cultura Machalilla, cuyos focos más intensos parecen haber estado al norte de la provincia del Guayas y sur de la de Manabí, significa una continuación de la Valdivia. Pero la cerámica da un significativo paso, al menos en tres aspectos.
Las vasijas negras intensamente ahumadas y pulidas, decoradas por líneas grabadas en la vasija después de cocida y ahumada y destacadas por un pigmento blanco. También se combina el negro del ahumado con diseños de engobe rojo. Los diseños siguen la tradición geométrica y lineal de Valdivia.
Aparece también en esta cultura una vasija de forma muy bella: copones de pedestal alto. Estas piezas, muy refinadas, tienen paredes sumamente delgadas.
Y hay una forma muy particular -que se extiende hasta México- la botella llamada de “pico de estribo”. Botellas de dos picos que se unen mediante un puente. Estas botellas se ornamentan en casos de un modo que se ha llamado “plástico” (para oponerlo al puramente pintado o rayado): con figuras modeladas, animales o humanas.
Encontraste con Valdivia, las figuritas de forma humana son más bien raras. Y aparecen alguna vez decoradas con líneas rojas muy finas. Presentan un rasgo característico muy curioso: en caras moldeadas, ojos sobrepuestos, con forma de granos de café.