Las diversas técnicas que se han inventado para las múltiples maneras de tratar las enfermedades son realmente increíbles. Una que es realmente curiosa y me ha llamado la atención es aquella llamada simpaticoterapia, que no tiene nada que ver con simpatía, pero a pesar de ser sencilla es muy poderosa para ayudar a problemas neuronales.

Sirve para combatir la depresión, se aconseja usar la técnica de la simpaticoterapia, ya utilizada por los chinos hace 4.000 años. El tratamiento consiste en cosquillear con el borde de una pluma de gallina la entrada de los orificios nasales hasta provocar estornudos y lagrimeo.

La expansión de los pulmones por efecto del estornudo y el desbloqueo de la presión torácica ejercen una acción liberadora de la tristeza o depresión repentina. El lagrimeo supone una descarga emocional que calma la angustia. Actualmente, algunos terapeutas utilizan utensilios específicos para provocar el estornudo, tales como sondas o varillas flexibles, que se introducen en los orificios nasales.

El fundador de la simpatología el ilustre médico mexicano Dr. Miguel López Esnaurrizar (1901-1994) nacido en la ciudad de México, durante sus 70 años de vida profesional realizo más de 100 publicaciones a nivel nacional e internacional.

La simpaticoterapia lejos de promover la mutilación fomenta la conservación de los tejidos u órganos afectados, a través de la regulación del sistema nervioso simpatico, estimulando y fortaleciéndolo para que recupere nuevamente la función celular adecuada y posteriormente la de los tejidos; no solo es utilizada como tratamiento para alguna enfermedad sino también como terapia preventiva de varias enfermedades.

En la gama de reflexoterapias, la simpaticoterapia ocupa un lugar privilegiado, como la acupuntura, auriculoterapia, reflexología, entre otras. El principio adoptado es el de su reflejo: un arco reflejo que se crea, a partir de cualquier parte del cuerpo, actuará en otro punto, el órgano o función, regulación, dispersión de la energía.

Es en este punto de vista que se ha creado la simpaticoterapia, la asignación de puntos o zonas de acción en varias partes del cuerpo.

Prueba a provocarte un estornudo cuando estes con estres o un poco con depresión, te sentirás mejor, ese es el objetivo de la simaticoterapia.